El poder de «una sola hora»
Es difícil imaginar la magnitud del Sol, pero este dato pone todo en perspectiva. En una sola hora, la Tierra recibe más energía del Sol de la que toda la humanidad consume en un año entero.
El sol bombardea la Tierra constantemente con 173.000 teravatios de energía. La humanidad entera usa «solo» unos 160.000 teravatios-hora al año. Esto significa que nuestro problema no es la escasez de energía, sino nuestra capacidad tecnológica para capturarla y almacenarla. Si se cubre una porción del desierto del Sahara con paneles, se podría superar la demanda mundial y sobrara energía, claro tendríamos que lidiar con problemas como el polvo, mantenimiento y limpieza constante, pero es tema de otro artículo.
Vamos a sorprenderte!
La energía solar es «tecnología vieja» (¡De 1883!)
Mucha gente cree que los paneles solares son un invento moderno de la era espacial o de los años 70, pero la realidad es que no.
La primera celda solar de estado sólido se creó en 1883, hace más de 140 años. Fue inventada por un inventor neoyorquino llamado Charles Fritts, ver img. Recubrió selenio con una capa extremadamente fina de oro. ¿El resultado? Una celda que producía electricidad, pero con una eficiencia de apenas el 1% (los paneles modernos superan el 20-23%). Aunque era demasiado caro para usarlo en ese entonces, Fritts predijo correctamente que algún día esa tecnología competiría con las centrales de carbón. ¡Un visionario!

Tus paneles no solo generan luz, también son un «escudo térmico»
Los paneles solares pueden bajar la temperatura de tu techo hasta 3°C o 5°C.
Piénsalo: la energía del sol que golpea el panel se convierte en electricidad o se refleja. Eso significa que ese calor ya no golpea tu techo. Los paneles actúan como una sombrilla gigante para tu casa. Estudios en climas frescos han demostrado que los techos con paneles solares reducen la necesidad de aire acondicionado, no solo porque generan electricidad barata, sino porque la casa se calienta menos en primer lugar. Es un doble ahorro: «Ahorro activo» (generación) y «Ahorro pasivo» (sombra).
El viaje eterno de un fotón (De 100.000 años a 8 minutos)
La luz que golpea tu panel hoy tardó solo 8 minutos en viajar del Sol a la Tierra, pero tardó más de 100.000 años en salir del interior del Sol.
La energía se crea en el núcleo del Sol mediante fusión. Allí dentro, la densidad es tan brutal que un fotón (partícula de luz) rebota millones de veces como en una mesa de pinball infinita antes de lograr llegar a la superficie y ser liberado. Ese proceso puede tardar cientos de miles de años. Sin embargo, una vez que escapa de la superficie, cruza el espacio y llega a tu placa solar en solo 8 minutos y 20 segundos. Estás usando energía que se «cocinó» cuando los humanos aún vivían en cavernas.
Einstein ganó el Nobel por la Solar, no por la Relatividad
Todo el mundo asocia a Albert Einstein con E=mc^2 y la Teoría de la Relatividad, pero ese no fue el motivo de su premio más prestigioso.
Albert Einstein ganó el Premio Nobel de Física en 1921 por explicar el Efecto Fotoeléctrico.
El efecto fotoeléctrico es la base científica exacta de cómo funcionan tus paneles solares: la luz golpea un material y «arranca» electrones, creando una corriente. Sin la explicación teórica de Einstein, la revolución solar que vivimos hoy no habría tenido la base científica necesaria para desarrollarse. Así que, técnicamente, ¡la industria solar le debe un Nobel a Einstein!
«La energía solar no es solo cuestión de ahorro o tranquilidad (que también), es participar en una historia científica fascinante que empezó en 1883 y que utiliza la fuerza de las estrellas como combustible para energizar nuestro hogar.»
